Estas fotos ilustran paredes, la mayoría en el campo cerca de Lagartera. Por aquí, las llamamos ‘paredes’, mientras en otros sitios, dicen ‘muros’ (1).

 Se puede intuir que las paredes tienen por lo menos cuatro funciones, según su tamaño y altura:

1) Paredes bajas, a veces sólo una piedra, que indican lindes, por ejemplo, para separar los olivares, indicando así los límites de estos, o para distinguir el terreno privado del terreno público de un camino.

2) Paredes medianas para que el ganado este dentro de un pasto, aunque actualmente, sobre ellas se colocan cuerdas o alambres para reforzar el cierre, y evitar que el ganado escape.

3) Paredes altas, muchas veces alrededor de los huertos. Los huertos pueden tener muchas funciones en su vida. Antiguamente se lavaba la ropa en los huertos, y para esto, no hace falta una pared alta. Pero una pared alta sí es útil para proteger las hortalizas y las gallinas de animales que los comerían.

 A veces hay perros dentro de los huertos, y una pared alta impide que se escapen. También una pared alta proporciona sombra en verano, y ayuda a crear un microclima dentro del huerto donde pueden crecer mejor los árboles frutales.

4) Paredes que retienen la tierra formando bancales que impiden la erosión, y permiten que crezcan mejor los olivos y otros cultivos en el lado donde se ha retenido la tierra.

También se pueden distinguir varios estilos de construir paredes:

1) Utilizando las piedras de los suelos rocosos, sobre todo en el sur del pueblo. Si ya había una piedra muy grande donde se quería hacer una pared, tenía sentido incorporar esa piedra a la pared.

Otras piedras que se incorporaban a la pared, eran las que se encontraban al arar.  Eran piedras más pequeñas que dificultaban la agricultura, y que se transportaban a la pared. Por eso, algunas paredes del sur del término municipal resultan algo anárquicas.

2) Con piedras de cantero, las más grandes abajo, y algunas grandes arriba para reforzando la pared.

3) Con piedras pequeñas.

4) Con piedras hasta su mitad, continuando con tapias, una técnica muy usada en las paredes de los huertos.

Algunas paredes de piedra están construidas sin ningún tipo de argamasa, mientras otras construidas con piedra y barro.

Hay una pared dentro del pueblo construida con una mezcla de escombros y piedras, que parece una obra de arte abstracto.

Cambios en las últimas décadas:  

1) Con la emigración, no hay tantas personas para cuidar los olivares. Antes, hasta los años 70, iba toda la familia para recoger las aceitunas. Ahora los hijos pueden estar en Madrid, Barcelona, u otros sitios lejos del pueblo. Además, la desaparición de la almazara significa que ahora es más difícil llevar la cosecha de un olivar pequeño para vender, o cambiarlo por aceite. Así muchos olivares, sobre todo los pequeños, con un acceso difícil, están abandonados, con lo que el mantenimiento de las paredes en ellos se ha abandonado. Mantener un olivar en esta zona, donde los olivares son relativamente pequeños, y no se puede mecanizar la cosecha, ahora se hace más por amor, que para ganar dinero.

2) El encarecimiento de la mano de obra está bien para los que pueden ganar un sueldo, pero significa que es más caro, en proporción a tu sueldo, pagar a alguien para construir o reparar una pared antigua. Mientras tanto se va olvidando las técnicas de construcción tradicionales, así es difícil encontrar a alguien que sepa hacerlo bien.

3) Ahora en los caminos cerca del pueblo, donde antes había paredes de piedra, hay paredes de bloques. Esto añade un problema cuando la pared de bloques es baja, pues las antiguas paredes retenían la tierra, y las nuevas paredes dejan tierra al descubierto, lo que contribuye al proceso de erosión y aumenta el riesgo de desertificación.

 ¿El patrimonio humilde?

Según Pepe Castaño del pueblo vecino de Herreruela, las paredes son parte del ‘patrimonio humilde’ de nuestro entorno (2). Quizá, por ser tan cotidianas, a veces miramos a las paredes antiguas y no apreciamos ni los conocimientos ni la paciencia de los antepasados. Es muy fácil, con una máquina, destruir lo que representa muchas horas de esfuerzo por hombres que tenían décadas de aprendizaje en el arte de construir paredes.

También, para mucha gente mayor, ‘lo antiguo’ representaba un pasado difícil, cuando muchas familias no tenían ni para comer, y ‘ser moderno’ parecía la solución para conseguir una vida mejor. Ahora nos damos cuenta que todos los cambios no significan ‘el progreso’, y podemos aprender algo de los antepasados.

Las antiguas paredes de Lagartera forman parte de su patrimonio, y merece la pena conservarlas. Son parte de la herencia cultural del pueblo, y realizan funciones importantes. Además, estéticamente son más agradables que los bloques. Conviene subvencionarse la construcción, reconstrucción y mantenimiento de ellas para conservar esta herencia.

Alison Lever, Lagartera, noviembre 2021

Gracias a J.M. Alía por su ayuda con este artículo.

1) pared | Definición | Diccionario de la lengua española | RAE – ASALE

2) www.fundacionmuseodeherreruela.com/blog/que-ver-herreruela-cercas-muradas.html